IV.— Condiciones mentales de la mujer:

Además de todas las condiciones mentales para el hombre, (léase todo lo anterior nuevamente, sustituyendo "hombre" por "mujer" y "esposa" por "marido") la mujer debe reunir las siguientes características:

a) Abnegación.

Esta es la principal característica femenina, que puede ser traducida por auto-er tfega total. La mujer que no .está dispuesta a entregarse totalmente a la realización de un fam¡l¡a,mejor sería que no se casara.

Un rasgo típico de la mujer que no se entrega totalmente es aquella que siempr siente necesidad de visitar a sus padres.

En realidad, ese tipo de mujer todavía no sabe si se queda con el marido o m Idealmente, cuando una mujer se casa, fe despide para siempre de su ex-familia y pasa entregar toda su energía a la nueva familia que va a formar. Si no, se queda con un p apoyado en cada lado, de manera muy precaria. En el Japón antiguo, la última y más ir portante ceremonia del casamiento, era cuando la novia se despedía de sus padres. En e momento el padre le entregaba a la novia el regalo de nupcias, diciéndole:"Ya no volvei a pisar la casa de tus padres y ya ellos no podrán solucionar nada por tí. Cuando los tie pos sean duros y las dificultades amenacen dominarte, encontrarás en esto todas las so ciones a cualquier problema", y le entregaba como regalo: iun espejo!

Un dato muy significativo es que después de que muere un héroe nacional o gi líder, mucha gente se vuelve hacia su vida privada, a sus cosas particulares, a su casa, ese momento es muy frecuente que salga a la luz del público la figura de la esposa de líder, y es muy común que, dada la simplicidad de sus vestimentas, habitación y modo vida, en un primer momento no sea reconocida.

Una historia conocida es la de la esposa de un conocido jefe de estado. Este bernante, en el momento de la mayor crisis de la historia de su país, tenía en sus mane tarea de simplificar totalmente diversos problemas distintos, bajo riesgo de condene país al caos total si no presentaba la solución nacional dentro de un cierto plazo exige En el día de la reunión con los otros líderes del país, este primer ministro estaba ap sivo: no había llegado a una solución. Cuando el automóvil oficial lo vino a buscar, el fer le abrió la puerta del auto y él entró seguido de su esposa. Esta señora lo acompaí siempre, para prepararle la comida, organizar los innumerables papeles, etc. Cuanc chofer cerró con fuerza la puerta y se puso en marcha, la mujer insinuó una muec dolor de la que el marido no se percató, inmerso en su pensamiento.

El viaje transcurrió en silencio v el paisaje dei amanecer se desfilaba ante et pen-sttivo jefe de estado. Poco después llegaron a la casa de gobierno. El chofer abrió la puerta para la esposa y horrorizado vio que ella había estado con el dedo apretado en la puerta del auto durante todo el viaje. Pero antes de que el chofer pudiera decir cualquier cosa, ella le hizo una señal brusca de silencio, y se bajó. El marido también se bajó y quedó parado ante los escalones del gran edificio. De repente alzó la mirada y exclamó: " i Encontré". Subió rápidamente y se dirigió a la reunión.

El dedo de esta señora cuya vida es hoy muy conocida, quedó inutilizado pero el país se salvó del caos. El chofer hizo pública esta historia.

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